jueves, 3 de julio de 2014

El Sol Me Viste…

El Sol Me Viste…






Precios de  plata en monedas, suenan
Curtidos los cuerpos cimbrean la llanura
Apenas sin mirar al horizonte, si quiera
Ni un ápice de repaso allegado sientes
Y tus pupilas criban sus rayos, fúlgidos.
Inicio la fantasmagórica rueda del equino
Zanahoria ante tus retinas dibujan rojizas
Las galas de una ruin colectividad al amparo
Verdes crestas de tallos y hojas frondosas
Acicalan el cuerpo erguido de tus faustos.
Un trozo de algodón, suave, fungoso, plúmbeo
Una tarde aclimatada, rauda en dormitar
Acaso unos ramajes de precavidos caminantes
Incluso una aceitosa pátina de ungüento avaro
Y tu multiplicidad yace bajo las aguas, no vistes.
Apareces, juegas, dilapidas las carnes débiles
Desgastas la cremada iónica en tormentas sutiles
Acribillas inventos de sarcásticas sornas ingenuas
Ilusionas a los hombres y delineas su espesura
Tienes el don, vestirme de acrescente luminosidad
O turbar mi ánimo hasta mendigar un adiós
Sin dolor, sin aspavientos, un liberador recuerdo
Que dentellee, mi sepia imagen, entre saetas perdidas.

Sol, inmenso tú, que declinas responder a mi llamado
Deja quieta tu antesala del parnaso, no me turbes
Visto débil existir en mi porte, sin tu magnanimidad
Zahiéreme con la sequedad, si hurgué hasta dañarte
Mas no retoces con las corolas de mi rojizo prexistir.

©Santiago Pablo Romero.Bluesman.

Imagen: FernándezCáceres.

1 comentario:

  1. Que belleza el poema y precioso también ese arte, esa bella pintura, gracias por el lujoso regalo, me encanta, un abrazo.

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